Editorial de Yuriko Backes, Ministra de Finanzas de Luxemburgo

Comillas SFF

Estimados lectores,

Permítanme comenzar felicitando a la Cámara Oficial de Comercio de España en Bélgica y Luxemburgo, por haber lanzado hace un año esta revista con el objetivo concreto de promover las ya excelentes y cada vez más importantes relaciones que nuestros dos países mantienen en el sector financiero. Quisiera aprovechar esta ocasión para reflexionar sobre la situación de Europa, la importancia de una economía europea fuerte, y el papel que desempeñan los centros financieros como Luxemburgo para ayudar a canalizar las inversiones que necesitamos para alcanzar un futuro más sostenible.

La guerra ha regresado a Europa, y con ella el mundo parece haber entrado en una era de “crisis permanente”. La guerra ilegal e injustificada en Ucrania no es sólo una tragedia humana, sino también una crisis adicional que se suma a la pandemia de la COVID-19. Y mientras tanto, la crisis climática no ha perdido un ápice de su urgencia.

El conflicto, que supone un duro golpe para la economía mundial, está disparando la inflación y los precios de la energía. Los gobiernos tienen que actuar para apoyar a los hogares y a las empresas en estos tiempos difíciles. Esto es exactamente lo que hemos hecho en Luxemburgo. En primavera pusimos en marcha medidas de apoyo por valor de 1.400 millones de euros, y recientemente se acaba de acordar otro paquete de más de mil millones de euros para luchar específicamente contra la inflación, frenando los precios de la energía y ofreciendo un alivio sostenible para el conjunto de nuestra economía, incluido el sector financiero.

Los esfuerzos a nivel nacional son esenciales, pero también necesitamos una fuerte respuesta común a nivel europeo. Me complace constatar que la solidaridad europea se ha mantenido firme durante la pandemia, y que la cooperación sigue siendo fuerte ante la agresión rusa en Ucrania. Nuestras respuestas tienen que ser inevitablemente europeas, tanto a la hora de proporcionar ayuda humanitaria, financiera y de emergencia, como en el ámbito de la seguridad energética, la transición energética o la lucha contra el cambio climático.

Sin embargo, para ayudar a los demás y luchar contra los retos comunes será necesaria una economía europea fuerte. La UE ha aprendido las lecciones de la crisis financiera y de la crisis de deuda soberana: como respuesta a la pandemia, se ha centrado en favorecer las inversiones que impulsan el crecimiento, especialmente en lo que se refiere a la transición verde y digital, en lugar de la austeridad. Lograr la doble transición hará que la economía europea no sólo sea más resiliente, sino también más competitiva.

Esto también significa fomentar un fuerte sector financiero paneuropeo para apoyar a nuestras empresas en la financiación de su crecimiento y la inversión en innovación. El sector financiero será clave para la ambición de la UE de convertirse en una economía neutra en carbono en 2050, lo que requerirá billones de nuevas inversiones. Para tener éxito en estas iniciativas, la UE tendrá que promover los servicios financieros transfronterizos dentro del mercado interior, sin dejar de estar abierta al resto del mundo.

Necesitamos centros financieros internacionales como Luxemburgo para ayudar a canalizar las inversiones y financiar la economía de la UE más allá de las fronteras nacionales. Luxemburgo es ya, hoy en día, un centro de financiación líder a la hora de movilizar el capital privado necesario para financiar proyectos sostenibles.

Durante los recientes intercambios mantenidos con algunos de los principales operadores financieros en Madrid, me complace y he tenido la ocasión de comprobar, que la sostenibilidad es una prioridad absoluta en su agenda y que ya están utilizando Luxemburgo como centro clave en Europa para promover sus productos de inversión sostenible.

Los centros financieros de nuestros dos países son complementarios en muchos aspectos y, como Ministra de Finanzas, una de mis prioridades es seguir desarrollando vías de colaboración y tender puentes que fortalezcan nuestras economías y ayuden a financiar el mundo del mañana.

Comillas 2 SFF

Autores

Yuriko Backes

Ministra de Finanzas de Luxemburgo

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