“La evaluación de nuestros clientes y la transparencia fiscal es muy importante para mantener una buena reputación y, por ello, los equipos de cumplimiento y regulación deben estar capacitados y entender el funcionamiento del negocio en su totalidad.”
Hoy en día, el modelo con el que trabajamos para invertir nuestro tiempo y patrimonio está cambiando rápidamente para todos los actores del mercado financiero.
Numerosos cambios están ocurriendo al mismo tiempo. En primer lugar, vemos una creciente preocupación por el cambio climático, un proceso de digitalización sofisticado y una transformación virtual de todos los proveedores de servicios. El uso de la inteligencia artificial es un tema que no podemos subestimar y que todo el mundo debería implementar en los procesos de toma de decisiones para analizar todas las posibilidades y riesgos relacionados con el negocio y la gestión patrimonial.
Nos damos cuenta de que la forma de gestionar las inversiones de la “vieja escuela” se va quedando obsoleta de cara a garantizar una buena continuidad de las empresas familiares y el traspaso de este patrimonio a próximas generaciones, las cuales nacen en un entorno virtual con acceso a cualquier información de confianza en tiempo real. Estas generaciones demandan activos sofisticados como Private Equity, Criptomonedas, NFTs, etc. No les preocupan tanto los riesgos y son menos pacientes a la hora de obtener rendimientos mientras invierten en activos que cumplen con los estándares ESG. Quieren tener un impacto positivo y un rendimiento al mismo tiempo que esperan un seguimiento y un asesoramiento continuos de cara a sus inversiones.
Las nuevas generaciones ya están bien informadas antes de venir a buscar nuestro asesoramiento y siguen más de cerca su estrategia de inversión que las generaciones anteriores, y no dudarán en cambiar de proveedor si consideran que no están consiguiendo sus objetivos esperados.
A día de hoy vemos mucha transparencia en todos los aspectos, donde todos los servicios deben estar bien justificados con un valor añadido.
Los sistemas informáticos deben estar totalmente protegidos para garantizar la privacidad de los clientes. El riesgo reputacional y la protección de la empresa es clave, ya que cualquier noticia negativa podría tener un gran impacto negativo para la empresa. La evaluación de nuestros clientes y la transparencia fiscal es muy importante para mantener una buena reputación y, por ello, los equipos de cumplimiento y regulación deben estar capacitados y entender el funcionamiento del negocio en su totalidad. Octogone Europe SA, como gestores patrimoniales independientes, nos estamos adaptando a las solicitudes e intereses de nuestros clientes,
sus familiares y sus asesores para poder ofrecerles soluciones a su medida. Siempre estamos abiertos a nuevos desafíos y oportunidades, conservando nuestros principios para proteger a largo plazo el patrimonio de nuestros clientes, enfocando nuestra atención en productos duraderos y seguros que cumplan con el perfil de riesgo del cliente.